Soy antipatriota y demagogo

Qué gran función desempeñan las hemerotecas. Las palabras ya no se las lleva el viento, y hay veces que es mejor estar calladito para no acabar retatado ante la historia. Corría el mes de abril de 2008, hace sólo 2 años, cuando de la boca del actual presidente del Gobierno Español, José Luis Rodríguez Zapatero, alias "ZP", salieron estas palabras...

"La actitud de quienes exageran sobre el alcance de la actual situación económica es antipatriótica, inaceptable y demagógica."

Entiendo que los políticos son de una pasta especial, que cuando acceden al poder no son capaces de distinguir las churras de las merinas, y que un mecanismo interno les impide reconocer sus propios errores. La culpa siempre la tiene el otro. Pero cuando todo el mundo ve una cosa y los que nos gobiernan ven otra completamente diferente, tenemos que preguntarnos para qué sirven las instituciones, que piensan que una palabra suya bastará para sanar nuestros temores, los cuales siempre llevarán la etiqueta de infundados.
No fue la única perla que nos regaló nuestro Mr. Bean particular. Ese mismo año jugó a pitoniso, soltando chorradas del calibre de "Aunque mañana crezcamos al 3% o al 2,8%, que es un crecimiento bueno, vamos a seguir creando empleo y teniendo superávit", o "Prometo crear dos millones de nuevos empleos", o "Nadie quedará a su suerte ante el drama del desempleo. Mi prioridad, es que no haya una sola familia en este país que pueda tener una situación de grave angustia o preocupación por la pérdida del puesto de trabajo". Vamos, como para montar una línea 906....

Y aquí seguimos, dos años después, con casi 5 millones de parados oficiales, con decenas de miles de familias sin percibir sueldo alguno, con miles de empresas cerrando cada día, con EREs, con susprensiones de pagos....y con los bancos apretando cual crueles carceleros en busca de sangre, después de que este gobierno decidiera regalar 150.000 millones de euros a los susodichos, que han empleado en sanear sus cuentas pero no a repercutirlo en los ciudadanos, mientras que a éstos les suben los impuestos.

Pero que nadie se crea que, con la que está cayendo, las estupideces han dejado de fluir por esa boquita...la última de ellas la soltó hace unos días, cuando, sin que le diera la risa ni nada, afirmó que "Una persona cuando está formándose está trabajando para un país, esto es lo que hemos descubierto de la crisis, que la formación y la innovación es fundamental". O sea, que no considera parados a los que están realizando uno de los cientos de miles de cursos, la mayoría absurdos, de formación que se realizan a lo largo y ancho del territorio nacional. Patético. Y encima lo suelta en mitad de una conferencia internacional, que si al menos su ridiculez fuera nada más que doméstica...

Y los sindicatos...¿qué opinan de todo esto?. Pues eso, convocan una huelga general a cuatro meses vista, con la inconfesable esperanza de que, o bien el cielo se desplome sobre nuestras cabezas antes de la fecha y así no sufrimos más, o bien que aparezca el genio de la lámpara de Aladino y nos conceda tres deseos. Y es normal....no van a morder la mano del que les da de comer.

Lo dicho: soy antiopatriota y demagogo. Pero honrado.