Aberrante campaña anti-Barça (Capítulo II)

Esta mañana, cuando he ido a tomar café, he pillado el Marca que estaba libre en la cafetería, y, tras ver el titular, a cuatro columnas, no sabía su reir a carcajadas o llorar por lo que fue un periódico serio y cada día se parece mas al Pronto....Resulta que la gran noticia deportiva del día la titulan así...¡Y ENCIMA SE QUEJAN DE LOS ÁRBITROS! Lo curioso es que abres el diario, buscas la noticia en el interior, y apenas tienes a Xavi haciendo unas declaraciones más que obvias y poco más, después de un partido en el cual acabaron jugando 9 contra 14. Pero como les parece poco, no dudan en masacrar al rival por abrir la boca o seguir pataleando, con premeditación y alevosía, en busca de que, lo que no puede el Madrid conseguir en el campo con 11 jugadores lo logre en cancha rival con 14, los once del equipo al que se enfrente el Barça, y los colegiados de turno.
Pero, claro está, no solo el Marca capitanea esta aberrante campaña, el Diario As no se queda atrás, reclamando una serie de jugadas como si el Barça fuera el único favorecido por decisiones arbitrales erróneas.

Y todo esto...¿porqué?....muy sencillo: su gran fichaje, Cristiano Ronaldo, no para de demostrar que tiene un carácter que da qué pensar si vale realmente lo que se pagó por él, y como hace dos semanas rompió la naríz a un rival y el árbitro osó expulsarle, la prensa madridista tuvo que salir por alguna parte, y lo hizo arrementiendo contra el campeón de Liga, Copa, Champions, Supercopas varias y Mundialito, en un afán de demostrar lo indemostrable: que el Madrid le llega a la suela de los zapatos a un Barça que, a base de clase y buen hacer, va camino de volver a hacer historia, le pese a quien le pese.

Termino con un consejo: Sr. Florentino Pérez, controle a sus medios, o acabarán siendo los enterradores que caven la fosa de un equipo que, si bien hay que admirar de ellos la caballerosidad y la inteligencia de gran parte de sus jugadores, por otro lado despierta cada vez más animadversión por parte de quienes no van al trabajo con la camiseta madridista, como parece ser que pasa en las redacciones de sus dos periódicos.