Premios

Últimamente me estoy quedando anonadado. Quizás sea yo el raro y el resto del mundo normal, vete a saber, pero no acabo de entender los criterios por los que se rigen los que otorgan premios de renombre en este último año. todo comenzó cuando me enteré que el Príncipe de Asturias del Deporte se lo concedían a Yelena Isinbayeva, cuyo único mérito ha sido a lo largo de los últimos años ser la única mujer competitiva en una especialidad atlética tan nueva como poco practicada como es el salto con pértiga femenino. Claro está, que después de que se lo dieran en años anteriores a gente que será muy buena, pero que están o estaban todavía casi en el inicio de sus carreras como Nadal o Alonso, el listón para recibir tal galardón ha quedado muy bajo. Y no digo que no sean grandes deportistas, pero considero que este tipo de nombramientos deberían hacere a gente en el final de sus carreras.

Pero todo eso queda en anécdota cuando observo anonadado que el Nobel de la Paz se lo conceden a Bark Obama, lo cual ya comenté en su día. Pensaba que nada podía sorprenderme más, pero en esto que llegan los premios Ondas, unos de los más prestigiosos a nivel de la comunicación en este país, y contemplo alucinado como es elegido mejor presentador de televisión....Jorge Javier Vázquez!!! Si la palabra "telebasura" tuviera entrada en la Larousse, la foto de este personaje aparecería ilustrando la entrada. Cara visible de programas tan interesantes e inteligentes como Aquí hay tomate o el más reciente Sálvame, cuya función consiste en rodearse de casposos analistas de la talla de Belén Esteban, Kiko Hernández, Mila Ximénez, Jimmy Giménez-Arnau o Karmele Marchante, regodearse de la vida privada de pseudofamosillos de tres al cuarto, faltar al respeto de la audiencia e invadir un horario protegido para la infancia con sutilezas tales como sugerirnos el supuesto pene de Lady Gaga me parece vomitivo.
Lástima, porque me parecían unos premios serios, casi tanto como los anteriormente nombrados. Pero ha llegado el punto que ya nada me va a sorprender en próximas ediciones. Cualquier indocumentado puede acceder a ganar cualquier premio. ¿Qué será lo próximo? ¿El Pulitzer para Leticia Sabater por su columna semanal en el Marca? ¿El Nobel de Literatura para Ana Rosa Quintana? Yo ya me creo todo...