lunes, 7 de diciembre de 2009
Ponga a un niñato carpichoso en su equipo
Si es que se veía venir...qué se puede esperar de un jugador de fútbol que es capaz de ponerse precio (100 millones) a sí mismo? Por muy bueno que seas, la modestia debe de figurar entre tus virtudes para dar el paso de ser un gran jugador a una estrella del deporte (que no mediática). Y le ha faltado tiempo a Cristiano Ronaldo en demostrar al mundo madridista que han vuelto a fichar a un aspirante a actor de Hollywood, a un niñato malcriado que antepone su fracaso personal al éxito del equipo, como lo demostró el pasado domingo ante el Almería, cuando falló el penalty que se inventó el árbitro y ni siquiera se acercó a celebrar el gol que marcó Benzema en el rechace, y poco después se autoexpulsó tras agredir a un rival, fruto de su frustración.
Las comparaciones tienden a ser odiosas, y en este caso, mucho más. A tiro de puente aéreo se encuentra un jugador como Messi que, sin hacer ruido, sin quitarse la camiseta para enseñar tableta de chocolate, sin calzarse gorras absurdas en su cabeza, le ha birlado el Balón de Oro de forma más que merecida, un jugador que a su club le costó un tratamiento para el crecimiento y que deambula por los terrenos de juego sin perder un ápice de su humildad, palabra que Ronaldo ha demostrado desconocer.
Puede que venda más camisetas que nadie, pero el Real Madrid (también) lo fichó para ganar títulos, y para cambiar su imagen. Craso error. Mientras el señorito continúe con sus excentricidades y sus salidas de tono, el club merengue tendrá en sus manos tan sólo un negocio para hacer caja, no un jugador que les proporcione títulos. Y esto último es lo que realmente importa en el mundo del fútbol....o no?
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tanto astro del balón, tanto galáctico...y luego llegan canteranos y sub(s) y les dan en los morros a los grandes, de ahi el partidazo del BArÇa con el Villarreal ;-))) (Vane)
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